El Divino Niño, acompaña a su pueblo en medio de la Pandemia

La Diócesis de Matagalpa, al igual que miles en distintas partes del continente celebra en el mes de julio al Divino Niño. Cada año el tercer domingo de este mes se realiza una multitudinaria peregrinación al Santuario Diocesano en la comunidad “Fuente Pura”, y en las parroquias se organizan diversas actividades, tal es el caso de la parroquia Nuestra Señora Guadalupe, Matiguás, donde la feligresía se une con alegría y devoción al celebrar de manera virtual producto de la COVID-19 y a través de jornadas de formaciones, los méritos de la infancia del Señor.

La hermana Judith María, de la congregación de los Misionero Serviam comparte un mensaje, recordando la infancia del Divino Niño.

“La devoción hacia el Divino Niño crece cada día en los corazones de sus devotos porque les lleva a recordar el amor, ternura, bondad y humildad que hay en él, el Niño Jesús se muestra en su infancia como un niño lleno de virtudes y gracias siendo hoy en día, un vivo ejemplo de humildad para todas las personas”, explicó.

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Asimismo agregó que este año la celebración del Divino Niño une a miles en amor y fe para pedir por el fin de la pandemia, por las personas que tienen problemas económicos, los que han perdido a un familiar a causa del virus y por cada petición que se haga con fe, “estamos seguro que él escuchará las plegarias”.

Jesús nos espera siempre:

La religiosa también destaca que el Divino Niño con sus brazos abiertos nos recuerda que está en todo momento con nosotros, esperándonos, dispuesto a escuchar los problemas, dificultades alegrías y tristezas, sus fieles devotos piden con esperanza que los acoja en su corazón para que en ellos reine el amor y que cada día crezca la devoción hacia él para difundirla en otros corazones.

“La devoción del Divino Niño es considerada como una de las devociones más tiernas y llenas de amor porque él es el camino, la verdad y la vida, transforma los corazones para ser hijos del Padre”, concluyó.

Redacción: Hilda Bermúdez.