En el XXI Domingo del Tiempo Ordinario el Presbítero Vicente Martínez, párroco de la parroquia Santa Lucia – ciudad Darío, manifestó que el Evangelio inquieta a todos, por eso encontramos la pregunta de Jesús a sus discípulos: ¿Qué dice la gente de mi? Para así conocer como andan sus discípulos. «Miramos que lo importante para Jesús no es lo que dice la gente, sino lo que dice cada uno de sus discípulos, cada bautizado, cada cristiano”.
«Actualmente en nuestro mundo hay personas que no conocen a Cristo, por lo que dicen Cristo es cualquier persona, cualquier personaje famoso, intelectual, pero miramos que esta experiencia de decir quien es Cristo en primer lugar requiere sinceridad, requiere una entrega, una adhesión a Cristo que entrega la vida por sus ovejas», recordó.
Reflexionar sobre el Evangelio:
También el padre Martínez señaló que a través de este Evangelio hay una confesión de fe de Pedro y también una confesión de Jesús quien le dice: “Tú eres Pedro”, es ahí donde se da una entrega, un compromiso, es ahí donde inmediatamente le da el titulo de primado, quien le dice: «Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y los poderes del infierno no la derrotarán».
«Observamos en el texto que Jesús nos habla de manera singular, haciéndonos el llamado que en el caminar de su iglesia encontraremos grupos, personas que dirán llamarse Iglesia, pero que no están en comunión con Pedro, ni con el Papa, es ahí donde debemos de entender que mientras no estén en comunión no podrán ser iglesia, porque Dios solo fundó una y fue a Pedro que le entregó las llaves del reino para que la guiara hacia Él», manifestó.
«Debido a esto hermanos es que debemos de darnos cuenta y preguntarnos en nuestro interior, en nuestro corazón: ¿Quién es Cristo para mí, para mi familia, para mi comunidad, para mi Ciudad? Lo que sólo estando en comunión, oración y adhesión con Cristo y la iglesia podremos conocer y dar una respuesta sinceridad a Jesús el Mesías», insistió.
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Finalizó diciendo que por más que sea atacada la Iglesia, jamás podrán derribarla, porque «Cristo fundó la iglesia sobre una roca firme, que siempre caminará hacia un horizonte seguro”.
Redacción: Juana Ruiz.
Parroquia Santa Lucía.