La formación sacerdotal en tiempos de Covid-19

La formación sacerdotal de los jóvenes seminaristas, en la Diócesis de Matagalpa, sigue con gran impulso y entusiasmo a pesar de la COVID-19 que azota a todo el país y la humanidad. Desde el 22 de Marzo han tenido que dejar las instalaciones del Seminario en sus distintas etapas; y para continuar con su formación lo hacen desde las parroquias o desde casa, dependiendo la realidad de cada quien, recibiendo las clases en línea.

Este ha sido un momento para recurrir al calor de hogar y a la amistad sacerdotal, inspiración que es un regalo del Espíritu Santo a Monseñor Rolando Alvarez y al equipo de formadores.

El día a día de los seminaristas en tiempos de pandemia:

La Parroquia San Juan Bautista en Muy Muy, al igual que otras parroquias, acompaña a cinco jóvenes. Ellos comparten cada día la vida espiritual con la oración de la mañana (laudes), la oración de la tarde (vísperas), el Santo Rosario, oración ante Jesús Sacramentado y la Eucaristía, permitiéndoles seguir la amistad con Jesús, que ya en su casa de formación desde meses anteriores intensificaban.

La formación sacerdotal de los jóvenes seminaristas, en la Diócesis de Matagalpa

Formación sigue regalando hombres con corazones de pastores:

El corazón de estos jóvenes se va convirtiendo cada vez más en un corazón sensible a las realidades que viven tantas personas, no alejado al sufrimiento, sino cercano. No son sólo estadísticas, son nombres, rostros, historias. En las diferentes conversaciones amistosas comparten la experiencia que vive algún familiar a causa de la pandemia.

En ocasiones parece ser un día normal, sin novedad, pero para los seminaristas es un día que suma cada vez más a la gran entrega de ser sacerdote y servir. Después de  la oración correspondiente de la mañana y el desayuno, se disponen a recibir las lecciones virtuales de cada docente, mostrando interés y dedicación en cada deber asignado.

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 Para ellos la conciencia de los desafíos del mundo actual les hace poder irse perfilando con alegría el sacerdote que desean ser; las exigencias del ministerio ayudan a comprometerse más en este tiempo de Pandemia y la amistad sacerdotal abona a seguir con mayor entusiasmo el llamado.

Redacción: Padre Danny García.

Parroquia San Juan Bautista, Muy Muy.