En la Solemnidad de la Epifanía del Señor, durante la Santa Misa que celebró el presbítero Vicente Martínez en la Parroquia Santa Lucia constató que, los nuevos Herodes de estos tiempos, son individuos que se visten de buenos para manipular al pueblo de Dios y que en cambio Jesús, es el rey del universo que se hizo pequeño para asemejarse a los hombres, menos en el pecado.
«Jesús viene a reinar con humildad, con pequeñez y con sencillez, no como los poderosos de esta tierra que buscan su propio bienestar matando y humillando a la gente con sus cetros de hierro, los grandes de la tierra, no son grandes, son débiles y es por esto que se mantienen protegidos con tantos guardaespaldas, porque saben que ellos no son fuertes porque si lo fueran reconocieran que Dios es el que pone reyes y Dios es el que quita reyes, si fueran humildes no tendrían temor de abandonar el poder mucho menos de que les juzguen», así lo resaltó el padre Vicente.
Un futuro mejor para Nicaragua:
Seguidamente el Padre Martínez manifestó que todos están invitados a hacer nuevos caminos, el camino de la conversión, el camino de regresar donde Jesús: “No podemos regresar al rey Herodes, a ese que nos va a querer matar, ofreciéndonos cosas falsas, como un oro que brilla pero que no es verdadero, Jesús no nos ofrece una vida pasajera, sino una vida eterna, pero para poder encontrarnos con él, tenemos que ser como estos Reyes Magos y ofrecerle lo que tenemos ya sea nuestras alegrías o nuestras tristezas”, afirmó el padre Vicente Martínez.
Un futuro mejor para Nicaragua:
En este sentido, invitó a ofrecer al Señor la vida, a las familias, a Nicaragua, la realidad de este pueblo que desangra en la emigración: “Ofrezcamos un futuro mejor para nuestra Nicaragua y pidámosle al Señor que nos de la gracia de dejarnos guiar por los signos pequeños, por los signos humildes, un niño nos ha nacido, un niño se nos ha dado el pueblo que caminaba en tinieblas vio una gran luz y esa luz es Cristo nacido en el portal de Belén, así mismo recuerden que la única estrella que debe de iluminar nuestras vidas; es la estrella que representa a Jesús, al Espíritu Santo, a todo cristiano, a todo ser humano”.
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“Hermanos que en medio de tantas estrellas que alumbran el mundo podamos dejarnos guiar por la verdadera y esa estrella es Jesucristo, porque desde el momento que Dios se encarnó, todo ser humano quedó redimido y redimido en primer lugar por el nacimiento de Jesús, en segundo lugar, por la Sangre de Cristo derramada en la cruz», finalizó el Padre Vicente.
Redacción: Zenelia Cordero Martínez
Diócesis Media Parroquia Santa Lucía, Darío.