La tarde de este domingo 23 de agosto la Parroquia San Juan Bautista de Muy Muy, concluyó las Misas Gregorianas, ofrecidas por los fieles difuntos durante un mes. Debido a la pandemia familiares de los fallecidos vivieron las misas a través de la página oficial de la parroquia.
Desde el 23 de julio se inició la celebración de 30 Eucaristías consecutivas que se les llama “Misas Gregorianas”, esta devoción la inició el papa Gregorio Magno, de allí el nombre de Gregoriana. Las personas recurren a esta práctica como obra de misericordia espiritual, sabiendo que la Eucaristía es el sacrificio perfecto para la expiación de los pecados, pues quien contempla el rostro de Dios lo hará puro y sin mancha.
Antes de iniciar con la homilía, el padre Danny García párroco de Muy Muy, agradeció a Dios por permitirle realizar las Misas y a las familias de los difuntos les invitó a seguir orando por ellos para que gocen de la vida eterna junto al Padre celestial.
“En el evangelio de San Mateo Jesús nos propone la meditación que él hace de una manera escalonada para entender quien es él, muestra lo que predica, las palabras que utiliza y es allí donde él quiere saber como la gente lo cataloga ya que él nos comunica la vida nueva. Pedro hace una profesión de fe que tiene que ver con el futuro que van a vivir, esa experiencia dolorosa donde el maestro es entregado, crucificado, va a morir pero lo más interesante es que él va a resucitar”, expresó.
Continuó su homilía manifestando: “Jesucristo es el hijo de Dios vivo, es el Mesías. Esta es la profesión de fe que anima a tantos hermanos, y en este momento que oramos por nuestros difuntos hagamos una profesión de fe con fuerza como Pedro dijo: Jesús tu eres el hijo de Dios vivo, tu eres el resucitado, y pidamos para que esta profesión se vea reflejada en toda la Iglesia porque estamos llamados a vivir la libertad de la resurrección”.
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“¿Quién es Jesús para nosotros? En todo momento debemos de hacernos esta pregunta y recordar que él no sólo es un personaje importante. Jesús es quien nos acompaña, en medio de las dificultades nunca nos abandona y nos trae vida eterna” concluyó.
Por: Hilda Bermúdez.
Parroquia San Juan Bautista, Muy Muy.