Quinto día de la Novena en Honor a la inmaculada Concepción de María

Iniciaremos este Quinto dia de la novena en honor a la Inmaculada Concepción de María diciendo: Por la señal de la santa Cruz de nuestros enemigos líbranos Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen.

ACTO DE CONTRICIÓN.

Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, solo por quien sois, porque os amo sobre todas las cosas, conociendo lo mucho que he pecado por mi culpa, una y mil veces, digo que de haberos ofendido me pesa; misericordia Dios mío, misericordia. Propongo firmemente la enmienda de mi vida, ayudado por vuestra divina gracia, Amén.

INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO

Ven Espíritu Santo llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor. Envía, Señor, tu Espíritu. Que renueve la faz de la Tierra. Oh Dios, que llenaste los corazones de tus fieles con la luz del Espíritu Santo; concédenos que, guiados por el mismo Espíritu, sintamos con rectitud y gocemos siempre de tu consuelo. Por

Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

PARA DAR LUZ INMORTAL SIENDO VOS ALBA DEL DIA SOIS CONCEBIDA

MARIA SIN PECADO ORIGINAL.

ORACIÓN.

¡Oh Reina Purísima de los ángeles y de los hombres! Mil gracias y alabanzas te damos porque a la puertas de la vida hallaste la dracma preciosa que perdimos todos en nuestro primer principio, hallando la gracia que te salió al encuentro y a la Divinidad que te esperaba en los umbrales de la naturaleza tomando tus potencias en el primer Instante de su ser, al nobilísimo objeto que las estrenó porque se creaban solo para El. Te rogamos, Purísima Señora, que, pues no hubo en tu Purísima Concepción ser sin conocer a Dios, ni conocimiento sin amor ni amor sin merecimiento, nos concedas conocer a nuestro Buen Padre Dios para que conociéndole le amemos, amándole le poseamos y poseyéndole le gocemos por toda la eternidad. AMEN.

QUINTO DÍA

Lectura bíblica (Jn. 2, 1-11)

Se celebraba una boda en Caná de Galilea y estaba allí la Madre de Jesús. Fue Invitado también a la boda Jesús con sus discípulos. El vino faltó y le dijo a Jesús su Madre:

«No tienen Vino». Jesús contesta: «Mujer, ¿Cómo se te ocurre? Todavía no ha llegado mi hora». Su madre, sin embargo, dijo a los servidores: «Hagan todo lo que El les diga». Jesús les dice: «llenen las tinajas de agua». Los sirvientes las llenaron hasta el borde. Entonces Jesús les dijo: «Saquen ahora y llévenle al mayordomo para que lo pruebe». Ellos se lo llevaron. El mayordomo probó el agua convertida en vine y como él no sabía de donde era, llamó al novio y le dijo: «Todos sirven primero el vine bueno y después el peor, pero tú has guardado el mejor vino hasta ahora». Así Jesús comenzó sus signos y manifestó su gloria y sus discípulos creyeron en él. PALABRA

DE DIOS.

CANCIÓN.

De la harina sois la flor

para el Pan Sacramentado,

que nunca tuvo salvado

la Masa del Salvador;

si para formarse Amor

la previno candeal.

SOIS CONCEBIDA MARÍA SIN PECADO ORIGINAL.

CONSIDERACIÓN.

Consideremos cómo el vino de las bodas de Caná simbolizan la plenitud de los bienes espirituales que Jesús trajo a los hombres. El vino del banquete nupcial de modo especial, nos recuerda la Eucaristía. María, aparece unida a su Hijo en Cana para que entendamos que Ella está siempre presente en la Celebración Eucarística anunciada y prefigurada en aquel banquete de bodas. Pensemos en el gran amor de Cristo a nosotros que lo llevó a quedarse realmente presente en el Santísimo Sacramento de la Eucaristía. La Purísima, dando Cuerpo y Sangre al Hijo de Dios Eterno colaboró activamente a nuestra Redención y a la Eucaristía. El Cuerpo y Sangre de Cristo que recibimos en la Eucaristía es carne que tomó de la Virgen María.

Procuremos imitar la pureza de corazón de María Inmaculada para prepararnos convenientemente a recibir la Santa Comunión.

(Aquí se puede rezar el ROSARIO, se hace la PETICIÓN y se cantan las TRES

AVE MARÍAS. Después se dice la oración del día).

LAS TRES AVE MARÍA

Oh Señora mía, Santa María, así como Dios Padre por su omnipotencia te hizo potentísima, así y te suplico que me asistas en mi muerte expeliendo’ y quitando todo lo que me fuera contrario.

DIOS TE SALVE MARÍA.

Oh Señora mía, Santa María, así como tu Hijo Santísimo se dignó darte tanta claridad y conocimiento de suerte que alumbras al cielo con tus luces, así yo te suplico que en la hora de mi muerte alumbres e ilumines mi alma con el verdadero conocimiento de la fe corroborándola de suerte que no la manche alguna Ignorancia o error.

Puedes leer: Novena en honor a la Inmaculada Concepción de María, cuarto día

DIOS TE SALVE MARÍA. Oh Señora mía, Santa María, así como el Espíritu Santo, con su amor, a Ti lo Infundió totalmente, así te suplico que te dignes darme para la hora de mi muerte la dulcedumbre del amor divino con la cual toda cosa amarga me sea suavísima.

DIOS TE SALVE MARÍA.

ORACIÓN DEL DÍA QUINTO.

Oh Jesús, que por amor a nosotros quisiste quedarte en el Santísimo Sacramento de la Eucaristía, te suplicamos, por los méritos de la siempre Virgen María, que nos purifique de tal manera que podamos recibirte dignamente en el Santísimo Sacramento y consigamos sus admirables efectos. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. AMEN.

La jaculatoria de este día será: ¡ARCA DE LA ALIANZA, RUEGA POR NOSOTROS!

ORACIÓN FINAL

Bendita y alabada sea la sacrosanta e Individual Trinidad de nuestro gran Dios y Señor, Padre, Hijo y Espíritu Santo, tres Personas distintas y un solo Dios verdadero; en quien creemos, a quien amemos de quien esperamos el perdón de nuestras culpas y la salvación eterna por su Infinita misericordia; bendita sea porque creó a Nuestra Señora, la siempre Virgen María, exenta, pura y limpia de toda culpa original, en el primer Instante de su ser natural, Amén. Jesús, María y José.

BENDITA SEA TU PUREZA

Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza. A Ti, celestial Princesa, Virgen Sagrada María, yo te ofrezco en este día alma, vida y corazón. Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía. Amén.

AVE MARÍA PURÍSIMA. SIN PECADO CONCEBIDA.

EN EL NOMBRE DEL PADRE Y DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO. AMÉN.

¿Quién causa tanta alegría? ¡La Concepción de María!

¿María de Nicaragua? ¡Nicaragua de María!

¿Matagalpa de María? ¡María de Matagalpa!

¡Que viva la Virgen María! ¡Que viva!