“Comprometámonos y anunciemos a Cristo con nuestro testimonio de vida”. Padre Vicente Martínez

En su homilía el presbítero Vicente Martínez párroco de Santa Lucía, Darío explicó que durante cincuenta días se ha anunciado la muerte y resurrección de Cristo, y el 23 de mayo, se continúa haciendo celebrando la solemnidad de Pentecostés, donde la iglesia impulsa a que “anunciemos que Cristo ha muerto y también ha resucitado, es el tiempo para que nos comprometamos y anunciamos a Cristo con nuestra vida, con nuestro testimonio”.

Presbítero Vicente Martínez

El sacerdote dijo además que ser cristiano implica responsabilidad y compromiso por ende se tiene que dar testimonio que se es otro Cristo: “En nosotros no habita la mentira, la división, las contrariedades, sino que imitemos el espíritu de las primeras comunidades cristianas que tenían una sola alma y un sólo corazón”, sugirió.

Dones del Espíritu Santo:

Además, hizo énfasis en que el temor de Dios llena de humildad y respeto: “Los cristianos no le tenemos miedo a Dios y por eso no tenemos que infundir en el corazón del pueblo el miedo a Dios sino el respeto, la admiración y la adoración, con esto nos damos cuenta que no somos dignos, pero confiamos en él”.

Seguidamente el padre expresó que “la Sabiduría” es esencial ayuda a sentirle sabor a lo divino, a lo sagrado, especialmente a la oración, a la Eucaristía y a la liturgia de la palabra: “Recordemos que nosotros en la Eucaristía, no somos espectadores, sino que nuestra participación tiene que ser plena, consciente y activa”.

“El Entendimiento es la luz que nos ayuda a entender la palabra de Dios y sus signos, el misterio de Dios, de Cristo, de la vida, del hombre y de la historia. El don del Consejo te ayuda a saber hablar y Escuchar. El don de Ciencia te lleva a captar a través de la creación la grandeza del amor de Dios. “La Fortaleza” ayuda a que no pongas tu corazón sólo en lo material, sino también en lo divino. “La Piedad, está hecha de agradecimiento de cariño, benevolencia y responsabilidad” explicó Martínez.

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“Cuando una persona está llena del Espíritu Santo sabe perdonar, porque el perdón es fruto del Espíritu, es leal y vive como Cristiano siendo sal y luz del mundo”, puntualizó.

Redacción: Heather Ríos.

Diócesis media, Parroquia Santa Lucía, Darío.