Monseñor Rolando Alvarez preside Misa de la Cena del Señor la noche del Jueves Santo

Monseñor Rolando José Alvarez Lagos, Obispo de la Diócesis de Matagalpa, presidió la Misa solemne de la Cena del Señor, al atardecer del Jueves Santo 1ero de abril, en la Iglesia Catedral San Pedro de la Diócesis de Matagalpa, donde seguido de la celebración dirigió la adoración Eucarística que luego continúan grupos de la parroquia hasta la media noche.

Durante su homilía el Obispo explicó que en esta celebración no se está haciendo una obra teatral, un recordatorio, una obra honorífica, “estamos haciendo un memorial, y en griego la memoria es un recuerdo que se actualiza, por eso estamos actualizando, es aquí y ahora que estamos haciendo lo que el Señor hizo, aquí el Señor nos está invitando a esta mesa, nos está llamando amigos, nos está amando con el amor con que nos ama, y lo está haciendo en un pacto de sangre, la sangre de Cristo para hacer un pacto como los judíos, indeleble, ese es un pacto para hacer ese misterio profundo del mandamiento del amor”.

Aquí recordó que esto es un misterio de amor incalculable, Jesús se quitó el manto para decirnos que no es superior a nosotros, Jesús se hace esclavo; en realidad a uno le dan ganas de decir lo que dijo Pedro: “Señor como me vas a lavar los pies a mi”. Jesús se hace esclavo de amor por nosotros, por “amarnos a nosotros”.

“Falta algo más: Y ¿es que Jesús se puede humillar ante nosotros? Si, porque estamos en una actualización. Hoy es una noche de amor, hoy mínimamente deberíamos declararle al Señor el amor que le tenemos, y el segundo aspecto que subraya el texto evangélico es que el Señor nos dice: Pues si yo que soy el maestro y el Señor les he lavado los pies, también ustedes deben lavarse los pies los unos a los otros”.

“Ya cada quien debería de ver si está dispuesto a humillarse, a abajarse por amor, no por cualquier amor, sino por un amor humilde, humillado, puro, en el amor de los limpios y los puros. Alguno me dijo: ¡Que lejos estoy de eso!, pero una cosa es estar lejos y otra cosa es desearlo”.

Institución de la Eucaristía:

Acerca de este misterio confesó que en la pandemia que no ha podido visitar las comunidades le ha correspondido muchas veces celebrar solo la Eucaristía, pero lo ha hecho más contemplativamente, en ese momento Cristo nos está redimiendo, y al celebrar los misterios de su pasión y muerte, es importante recordar que es Cristo el que está celebrando, actualizando su pasión, muerte y resurrección. “Y en esta Eucaristía Jesús dirá: Hagan esto en memoria mía… Es él el que actualiza el misterio”.

Puedes leer: En Misa Crismal 2021: Monseñor Rolando Alvarez recuerda 10 años de Ministerio Episcopal

Al referirse al gesto del lavatorio de los pies, recordó que cuantas veces pidió autorización a las autoridades del Sistema Penitenciario para que le permitieran traer a algunos presos y lavarles los pies en esta Misa, y cuantas veces se lo negaron, “¿porqué me lo impidieron? Como me impidieron ingresar al sistema a Confirmar, yo no soy enemigo del sistema penitencia ni del ministerio de gobernación”, dijo.

Luego de la homilía invitó a hacer silencio interior mientras se entonaba un canto en el momento en que la liturgia propone el lavatorio de los pies, que esta vez no se realiza por la pandemia del COVID-19.

Redacción y fotografías: Manuel Antonio Obando Cortedano.

Diócesis Media.