En la Homilía del XXIII Domingo del tiempo ordinario, el padre Uriel Vallejos párroco de la parroquia Divina Misericordia – Sébaco, recordó cómo vivir el amor de Dios en las relaciones interpersonales, haciendo énfasis en Santa Teresa de Calcuta.
«Todos recordamos a esta Santa, Santa Teresa, contemporánea, que nos enseñó a describir a Dios, la presencia de Cristo en cada hermano, especialmente en los hermanos más necesitados: en los enfermos, en los pobres, en los migrantes, en los encarcelados, en aquellos que sufren», expresó el Padre Vallejos.
A través del Evangelio reflexionó sobre un tema vital, como es el tema de la comunicación del ser humano con Dios, explicó que el Evangelio habla a cada cristiano aquellos que muchas veces están replegados y encerrados en ellos mismos
«Dios ha rompido el silencio y se ha comunicado con nosotros. Ser creyentes, tener fe, es primeramente aceptar que Dios nos ha hablado y nos sigue hablando, pero nos puede pasar como al pueblo de Israel que se comportó como un pueblo sordo, que no escuchó la voz del Señor, entonces Jesús tiene primero que curarnos de nuestra sordera, sacarnos de nuestro aislamiento egoísta que nos incomunica con Dios y con los demás», explicó el Padre Uriel.
«Las relaciones humanas más elementales a veces crean realidades incapaces de una apertura recíproca, la pareja cerrada, la familia cerrada, el grupo cerrado, la Parroquia cerrada, la patria cerrada, esto no es de Dios, esto es nuestro, es nuestro pecado. No es Sano confundir la comunicación con el mero contacto virtual», manifestó el presbítero Vallejos.
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Era de medios de comunicación:
Además, recalcó: «Estamos en la era de los medios de comunicación y redes sociales que pueden ser un magnífico canal de comunicación y también de evangelización. El ambiente digital también es un territorio de soledad, manipulación, explotación y violencia, hasta llegar al caso extremo de la Dark Web que pueden exponer al riesgo de aislamiento y de progresiva pérdida de contacto con la realidad concreta, obstaculizando el desarrollo de relaciones interpersonales auténticas».
Concluyó pidiéndole al Señor que abra los oídos y el corazón de la humanidad para aprender a escuchar su Palabra y alcanzar una buena comunicación con él y con los demás.
Redacción: Brayan Ramírez
Fotografías: Canal Católico de Sébaco.
Diócesis Media.
Manuel
Obando Pèrez Maria Manuel