El 18 de abril del 2021, tercer domingo del tiempo pascual el presbítero Vicente Martínez párroco de Santa Lucía, Ciudad Darío, presidió Santa Misa, y en su mensaje hizo énfasis en que la Iglesia no es indiferente al dolor, y por eso siempre ha tenido la iniciativa de defender los derechos del pueblo.
El sacerdote inició recordando la fecha del 18 de abril del 2018, explicando que este problema en Nicaragua surgió porque querían quitarle a los ancianos su dinero: «Miramos que el poderoso insistió, en cambio la gente se levantó obteniendo respuestas negativas porque se le respondió al pueblo con armas, pedradas, guerra, a tal extremo que si la ciudadanía no se hubiera retirado la cantidad de fallecidos fuera mayor».
El Padre también dijo que la Iglesia desde siempre ha priorizado los derechos humanos: «La iglesia siempre quiere que haya derecho a la vida, a la salud, a la educación, a tener una vivienda digna, un trabajo digno, y tomando la iniciativa a resolver problemas sociales estando siempre con el pueblo».
Testigo de todas las injusticias:
El sacerdote manifestó que quien es testigo de todas las injusticias que se cometen y no pide justicia se está convirtiendo en cómplice: «Recuerden que los poderosos del mundo sea quien sea le interesa su dinero, su poder, la ambición y no le interesa otra cosa porque si le interesara el bien del pueblo no hubiera tanta pobreza, hambre, miseria, gente emigrando hacia otros países».
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«Hemos mirado el caso del niño al que dejaron en el desierto, a su mamá la secuestraron, ¿Qué hacen los poderosos? Están buscando como traerlo para acá porque dicen que les interesa la vida del pueblo, eso es pura hipocresía, porque si les interesara buscaran que la gente tenga trabajo y no hay trabajo, usted sabe muy bien que el que tiene trabajo no habla por miedo, es entendible que en el caso de las personas que le trabajan al estado, no hablen por miedo a perder sus empleos, o tener algún tipo de represalias», expresó el padre.
No callaron los apóstoles:
«Estos casos llevan a reflexionar que en situaciones similares, los apóstoles no callaron ellos dijeron, no podemos callar lo que hemos visto y lo que hemos sentido pero, los seres humanos hace todo lo contrario, quieren agradar al ser humano, porque se busca intereses personales y no se interesa por la vida del hermano”, señaló.
Para finalizar el presbítero explicó que los católicos no tienen que poner su vida, familia y amistades en manos de una persona, ya que hay gente que por la situación desde el 2018 hasta la actualidad, todavía son enemigos, porque creen que los ídolos van a ser para toda la vida, y no, en la vida no hay persona eterna, eterno sólo Dios.
Redacción Heather Ríos, Diócesis Media Radio Santa Lucía Darío.