“Cuidemos el templo y nuestro cuerpo, que es templo de Dios”. Presbítero Salvador López

El padre Salvador de la parroquia San Juan Bautista en Matagalpa, hoy en el tercer domingo de cuaresma dijo que el Señor llama a reflexionar sobre el celo al templo, pero también “nuestro cuerpo que es templo suyo. Debemos llevar una vida sencilla y humilde en la pobreza, porque la fe y el templo que es la casa de Dios no se puede convertir en un mercado. El Señor quiere una casa Espiritual donde se celebren los sacramentos para el crecimiento de una vida como cristianos”.

Para todos, el templo debe de ser algo sagrado y digno, pero no se trata sólo del templo material sino también el templo espiritual que son nuestros cuerpos porque nosotros somos consagrados a Dios, somos templo del Espíritu Santo por lo tanto no podemos convertir en mercador nuestros cuerpos.

Presbítero Salvador López, Cuidemos el templo y nuestro cuerpo

¿Cómo podemos santificar nuestro cuerpo?:

Con respecto a la santificación del cuerpo el padre Salvador dijo que lo “podemos hacer con obras penitenciales como el ayuno, la oración y la limosna que son aspectos que nos ayudan a purificar nuestro cuerpo y también la conversión. Hay que ir edificando nuestro cuerpo que son parte del templo de Dios cuando comulgamos queda Cristo en nosotros y en nuestro corazón”.

También dijo que el Señor quiere “que le sirvamos sólo a él y que nos dejemos guiar por sus mandamientos porque él quiere nuestra salvación, no hay que construir ídolos porque muchos crean dioses a su manera a su interés a su voluntad y no a la voluntad de Dios”, indicó. A la vez recordó que es importante servir y buscar a ese único Dios y verdadero que “nos ama, nos perdona y nos da la salvación”.

El religioso destacó las palabras del papa Francisco: “Si somos hermanos no debe de existir odio”, “si Dios nos perdona tenemos que ser misericordioso con el hermano porque Dios es amor y nos invita a la convivencia pacífica entre nosotros y debemos de ser cristianos de paz y amor”.

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“No vivamos una fe acomodada, en esta cuaresma llevemos la cruz al igual que Cristo, con los sufrimientos de la vida y seamos celosos con Dios, sólo mi Dios, nada más, no otros dioses, finalizó.

Redacción: Kellys Berenice Rivera.
Diócesis Media, Parroquia San Juan Bautista Matagalpa.