«La fe de los Cristianos no debe ser un espectáculo, sino el camino que nos acerca al Señor». Presbítero Vicente Martínez

En la Santa Misa de jueves Eucarístico, el presbítero Vicente Martínez en la parroquia Santa Lucía, Darío, expresó que los cristianos se reúnen como una sola Iglesia para adorar al Señor y pedirle que ayude a descubrir que la fe del Cristiano no debe ser un espectáculo, sino el camino que les acerca al Señor, porque como iglesia Diocesana la cruz debe seguir firme  y la fe también.

Manifestó que en la liturgia de este jueves, a cada uno  se le muestra la importancia de su fe, del vivir la Santa Eucaristía durante la asistencia a la casa de Dios: “En el  antiguo testamento existía muchos espectáculos, muchas trompetas, mucha bulla cuando los profetas, reyes, hombres grandes de la biblia se aceraban a Dios, habían un espectáculo extraordinario, en cambio dice la carta a los Hebreos, ahora nosotros  en estos tiempo, no, nos acercamos a un espectáculo cuando venimos a la Eucarística, no venimos a encontrarnos con algo sentimental, venimos a misa porque nuestra fe es firme, porque sentimos la necesidad de acercarnos al Dios viviente, nos acercamos a la Jerusalén celestial, a la fiestas de miles de ángeles, a la  asamblea de los primogénitos”.

Tambien el sacerdote indicó que si los fieles van a la santa Eucaristía es porque deben reconocer que la sangre de Cristo no es aquella sangre pecadora, no es aquella sangre que manda a condenar, no es castigadora, sino que es la sangre del perdón, de  la misericordia, es la sangre que les dice a cada uno de sus hijos que para llegar a la eternidad deben de perdonar, porque solo así encontrarán el camino que les acerca a ese Dios que tanto les ama, que clama amor y misericordia.

Presbítero Vicente Martínez

DIOS LLAMA A LA MISIÓN A TRAVÉS DEL EVANGELIO:

«Si leemos el Santo Evangelio del día, nos daremos cuenta que nos habla de la misión, la evangelización, como Dios va llamándonos para que nos sentemos, no para que nos crucemos de brazos, no para que pensemos que todo está perdido y no hay que hacer nada, no es así, Dios nos llama para recordarnos que la misión de la iglesia no se  hace  a través del aislamiento, la misión de la iglesia no se hace como el pizote solo, el Señor manda de dos en dos a sus discípulos para que se hagan amigos entre ellos, para que se conviertan en testigos y se forme una comunidad en su nombre,  porque el mismo Dios dice: Donde hay uno o dos reunidos en mi nombre ahí estoy yo, es decir hermanos, el Señor nos habla así para recordarnos que en la iglesia debemos invocar la Divina Providencia”.

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Finalmente instó a pedir al Señor que “nos conceda, la gracia de ser sus testigos, que nos permita ser promotores de justicia y paz, pero sobre todo  nos regale la conversión para expulsar los demonios de nuestra vida y familia, para a la hora de recibir la unción de los enfermos nos sane y cure del alma y cuerpo».

Redacción: Juana Ruiz – Diócesis media parroquia Santa Lucía, Darío.