“El hombre virtuoso es aquel que perfecciona sus cualidades al servicio de Dios y para el bien de los demás, no busca el lucro ni la fama, ni está atento a su interés personal” expresó el Padre Juan Francisco Zeledón, párroco de San Dionisio, en la santa Eucaristía dominical de este 26 de julio, que ofreció por la unión familiar y por todas las necesidades del mundo entero, durante este tiempo de pandemia.
El sacerdote explicó que la liturgia de este día, está centrada de un gesto hermoso de súplica y sobre todo de humildad, un ejemplo vivo de ello, es Salomón, que muy bellamente lo describe la primera lectura proclamada.
Destacó la sencillez de Salomón, que reconoce su débil humanidad, que necesita de una gracia para poder guiar al pueblo por un camino justo y recto. No le pide a Dios riquezas, ni grandezas, ni muerte ni destrucción, sino, sabiduría.
“Que importante es reconocer al hombre de virtud, porque sólo el que es virtuoso sabrá escoger las cosas buenas para el bien de la humanidad, sólo el que es virtuoso sabrá gobernar y atenderá el bien de sus hermanos” manifestó el presbítero.
Las virtudes de un gobernante:
Refiriéndose a la obra filosófica de Platón, “la República” señaló que las ciudades, no resolverán sus males en cuanto, no lleguen hombres virtuosos al gobierno, por eso, la virtud se ancla a las tres partes del alma, la prudencia, en la que el hombre sabe hacer bien las cosas, la fortaleza, que no es signo de imposición, sino que se encuentra en el diálogo, es mirar al otro como persona y la templanza, es la virtud que nos ayuda a controlar todos esos desórdenes que el mundo nos puede dar.
“Es por eso que, en nuestra sociedad nicaragüense necesitamos a este tipo de gobernadores que posean estas virtudes y sean capaces de contemplar la verdad, gobernadores que estén plagados de conocimiento y no de ignorancia, porque un buen gobernante es amigo de la verdad y de la justicia, no se guía por vanos criterios y no obliga a hacer al pueblo lo que él quiere” dijo el párroco de la localidad.
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Al finalizar la Eucaristía, el padre Juan Francisco, invitó a los fieles de San Dionisio, a unirse al rezo de los 9 domingos en honor al Divino Niño, a través de los medios de comunicación, finalizando el 20 de septiembre, día en que se celebrará dicha festividad.
Puso a los pies del Divino Niño a Nicaragua, para que, por los méritos de su infancia “nos veamos libres de cualquier peligro y pronto pueda surgir un gobernante que sienta, haga y practique la justicia para el pueblo” concluyó.
Redacción: Edgar Balmaceda.
Parroquia San Dionisio.