La parroquia Divina Misericordia en Sébaco, continuó con su triduo de misas en honor al Señor de Esquipulas el viernes 14 de enero, en su segundo día, donde los fieles devotos al Cristo Negro de Esquipulas acuden con gran fervor pidiendo por una intención especial al Cristo Milagroso.
En este triduo de misas se continúa orando por el cese de la pandemia de la Covid-19, por los migrantes que a diario salen de estas tierras nicaragüenses en busca de una mejor vida, por Nicaragua para que haya paz y por los que están presos injustamente en las cárceles.
Cabe destacar que la eucaristía de los días viernes acuden de manera especial todos los miembros de los movimientos y cuadros pastorales de la parroquia a quienes el Padre Uriel Vallejos durante su homilía dirige una pequeña formación, retomando dentro de la misma los numerales 781 y 782 del catecismo de la Iglesia católica, esto para el fortalecimiento de la fe.
Invitación a meditar sobre el significado de la fe:
El padre Vallejos invitó a los fieles a meditar sobre el significado de la fe, añadiendo el padre que la escritura descansa sobre la fe y permanece inspirada en todo momento un espíritu de fe, también recalcó que la fe es una actitud de confianza en la presencia de Dios, ya que es una apertura a lo que Dios revela hace y provoca.
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“Cuando actuamos con esta visión transformadora, puede suceder cosas increíbles porque nos hacemos sometidos a un poder que está actuando en nosotros y puede hacer infinitamente más de lo que podemos pedir o imaginas, incluso un poco de fe, hace una diferencia extraordinaria”, explicó el padre Uriel.
Redacción: Alexandra Chavarría
Fotografía: Brayan Ramírez
Diócesis Media, Parroquia Divina Misericordia, Sébaco.