Para ser verdaderos discípulos de Jesús se debe predicar la buena nueva, Padre Vicente Martínez

El jueves eucarístico, 3 de febrero, el padre Vicente Martínez celebró la Santa Eucaristía en la parroquia Santa Lucía, en ciudad Darío, y en su homilía reflejó la exhortación de Jesús, que su pueblo predique la buena nueva que es el Evangelio, para ser verdaderos discípulos de Cristo, para ser misioneros.

En este sentido, dijo que en la actualidad hay mucha gente que se olvidan de ser misionero, porque cargan distintas ataduras como el dinero, las riquezas, el materialismo y por lo tanto, cuando les toca dejar el materialismo, lo económico ya no quieren, pero cuando llega la muerte ahí buscan que hacer: «Ahí tenemos que dejar las sandalias, el pan, el dinero, la ropa, la fortuna, porque para el viaje de la vida eterna no necesitamos el materialismo», aseguró el Padre Martínez.

Un verdadero discípulo de Jesús:

«Un verdadero discípulo de Cristo, un verdadero enviado, un verdadero cristiano católico no anda en el mundo haciendo sus caprichos, es decir, no anda haciendo lo que se le pegue la gana, especialmente cuando hay gente soberbia, no se impone el evangelio, el evangelio se recibe desde la libertad», añadió el Padre Vicente.

Desde el día den bautismos el cristiano tiene autoridad:

«El Cristiano desde el día del bautismo tiene la autoridad de Cristo, la autoridad para expulsar al demonio de su vida, el demonio de su corazón, de su familia, de sus amigos y compañeros de trabajo, usted cuenta con esa autoridad, sólo falta que creamos en las palabras de Jesús que son espíritu y vida», resaltó el padre Vicente Martínez en su homilía.

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Para finalizar manifestó que todos están invitados a creerle a Jesús que manda con autoridad a predicar la conversión, a confiar en la Divina Providencia, que sepan ayudar y caminen juntos a ese reino que Dios a todos les tiene prometido: «Que Jesús sacramentado nos ayude a nosotros a buscarlo a él y convertirnos en otro Cristo, para que expulsemos el mal de nuestra vida, el mal en el mundo y el mal en nuestras familias», concluyó el Padre Vicente.

Redacción: Zenelia Cordero Martínez

Diócesis Media parroquia Santa Lucía, Darío.